EL PUMA

El Puma: Mi Espejo Interior

El puma es un líder solitario, una criatura de independencia feroz. Esa dualidad de liderazgo y soledad es algo que siempre me ha caracterizado en mi camino. Como el puma, he aprendido a moverme con paciencia, a ser discreto en mi proceso y ágil en la ejecución de mis ideas. La independencia es mi motor, y la paciencia, una virtud indispensable en la búsqueda de mi obra y en el desarrollo de mi carrera.

Este enorme gato, solitario y depredador, se adapta a cualquier terreno. Su agilidad, sigilo y paciencia son cualidades que aspiro a dominar en mi propio arte. En lo místico, el puma es un potente símbolo de liderazgo, poder discreto, agilidad mental y física, independencia, protección y la sabiduría de la paciencia y la observación. Representa la fuerza interior que reside en cada individuo y la conexión con la sabiduría ancestral de la tierra. Para mí, el puma no es solo un animal; es una guía, un tótem que me enseña a cultivar mi propia fuerza y a escuchar mi intuición.

Mi Proceso Creativo:La Caza del Artista

El puma, también conocido como león de montaña, cougar o pantera, es un gran felino nativo de América. Su presencia majestuosa, su naturaleza solitaria y su habilidad como cazador lo han convertido en una figura de gran importancia en la simbología mística de las culturas indígenas americanas. Estas características son un reflejo de cómo abordo mi trabajo.

Así como el puma es un mamífero carnívoro de la familia Felidae con la distribución más amplia en América, yo busco expandir mis horizontes artísticos. Mi morfología como artista se moldea por mi entorno y mis experiencias. Mi mente es el pelaje que cambia de color, adaptándose a nuevas ideas y proyectos, mientras que mi cuerpo, delgado y flexible, está listo para la agilidad mental que requiere cada obra. La cabeza pequeña y redondeada, siempre pensando, siempre observando. Y la cola larga y gruesa, mi intuición y experiencia, esencial para el equilibrio en cada salto creativo.

Mi estudio, mi hábitat, es un espacio adaptable. Desde la intensidad de un bosque denso de ideas hasta la aridez de un desierto creativo, me adapto. He aprendido a vivir y crear en una gran variedad de ecosistemas: desde la experimentación densa de nuevos materiales hasta la pradera abierta de la inspiración.

Mi comportamiento como artista es similar al puma: soy mayormente solitario en mi proceso, excepto cuando colaboro o comparto mi obra. Soy un depredador sigiloso de ideas, siempre cazando conceptos y formas. Trabajo principalmente al amanecer y al anochecer, cuando la musa parece susurrar con mayor claridad. Soy territorial con mi visión y mis proyectos, marcando mi área con cada pincelada, cada trazo. A pesar de mi presencia en el mundo del arte, soy silencioso y elusivo en mi método, prefiriendo que sea mi obra la que hable por mí.